domingo, 16 de noviembre de 2008

SE PERDIÓ EL DESTINO DE LA MALETA

Me está pesando la maleta que vino contigo, la llevo sobre mi espalda la mayoría de veces, pero siempre la guardo en la cajita que abrí en mi corazón para ti.

Me pesa no por los recuerdos más lejanos, que sin fotografrías puedo recrearlos y contarlos mejor que como sucedieron, sino porque he pintado letras en el camino para regalarte cosas, luces, pensamientos, días, lunas, cielos y sonrisas, está tan llenita que creí que había llegado el tiempo para que destaparas mis regalos pero era demasiado tarde.

Al pensar en llegar a tu puerta con la maleta en la mano, la puerta ya estaba cerrada, no me dejaste nota ni señales de tu camino.

¿Qué hago ahora que no vuelves, si en esa maleta está todo lo que ha sido construido y amado para ti?

martes, 11 de noviembre de 2008

YA HUELE A TI DICIEMBRE

Y entonces cuando te huelo, no quiero parar, se me acaba lo último que queda en los pulmones, al volver a tomar aire, siento que he perdido mucho de tu olor. Ahí viene contigo la nostalgia, las ganas de esconderme sin que me hagas daño, pero también las ansias de volverte a ver, para saber que tan llenito llegas.

Esas luces que alumbran todos los días del año, sólo contigo brillan diferentes, tienes magia extraña, como la de esos ojos que son el reflejo del mar…

Diciembre, cuando llegas, todo lo igual es distinto por treinta y un días; los carros, las luces, el amanecer, los recuerdos se vuelven constantes, el pasado vuelve cargado de amor, de nostalgia, de tristeza y de agradecimiento…

Me da miedo cuando llegas, porque no sé como acabes cuando te vayas, como si el cambio de año trastornara mi vida de manera abrupta. Te anhelo, pero cuando llegas a la puerta me das miedo, no sé como recibirte, si te sonrío, quiero llorar, y si te ignoro me reclamas ¿por qué?

Pero no puedo parar al verdugo. Al tiempo. Así que adelante, gracias a Dios estoy con quienes también amo y hacen parte de mi, para recibirte. Gracias por llegar, y por permitirme esperarte una vez más, Cuando vuelvas, ¿Te puedo pedir un favor?, Quiero recibirte con ellos.
TE AMO.